
El cómic underground es, sin ninguna duda, un tipo de trabajos difíciles por su carácter transgresor, divertido y con un dibujo poco amable. Esto es, precisamente, lo que queremos recordar hablando de Pudridero. Este trabajo que lo podemos encontrar gracias a la editorial Fulgencio Pimentel, es un desparrame de diversión gore desenfrenada.
Ryan, acertadamente, se aleja de los elementos realistas para plantear una obra repleta de violencia y aspectos desagradables. Lo interesante es que, como se aleja de realismos, la obra resulta francamente graciosa y divertida. En este sentido, en sus páginas se da rienda suelta a la imaginación infantil, pero repleta de elementos adultos.
Por todo esto, entre sus páginas nos encontraremos elementos escatológicos unidos con una violencia carente de sentido. Eyaculaciones que se transforman en seres violentos o grandes defecaciones, además de otros sucesos, más desagradables, son algunas pequeñas ideas que el autor ha plasmado en Pudridero.
Todo ello, de un modo u otro, me recuerda a las razones que te indica un niño pequeño de por qué ha aplastado a la oruga o al gusano que ha encontrado. Cuando le preguntas a alguno te puede decir “no lo sé” o te cuenta una “historia” peculiar y, probablemente, algo extraña. Estos aspectos, entonces, estarán todos por aquí.
Como habréis adivinado, la historia no es demasiado profunda. No la voy a comentar, ya que en pocas líneas os contaría la historia entera de la obra. Simplemente os dejo este comentario ante una obra que conviene leer para todos aquellos que estén interesados por el cómic transgresor y sin sentido.
Por Xiana Martín.